La medida aumenta la presión de la administración para que la universidad se alinee con las exigencias del presidente de EEUU
Trump insiste en eliminar la exención de impuestos de Harvard
La administración de Donald Trump ha bloqueado este jueves la capacidad de la Universidad de Harvard para matricular a estudiantes internacionales, según ha adalentado The New York Times y ha comunicado el departamento de Seguridad Nacional. La medida supone una importante escalada en las maniobras del Gobierno de EEUU para presionar a la institución académica para que se alinee con la agenda del presidente.
Según The New York Times, el Gobierno de EEUU ha notificado a Harvard su decisión tras varios días de disputas legales en torno a una amplia solicitud de información como parte de una investigación del Departamento de Seguridad Nacional.
“Les informo que, con efecto inmediato, queda revocada la certificación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio de la Universidad de Harvard”, dice la carta enviada a la universidad por Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional, a la que tuvo acceso The New York Times.
Esta decisión se produce en medio de una escalada entre Harvard y Trump por las acusaciones del Gobierno de tolerar el antisemitismo en el campus.
“La dirección de Harvard ha creado un entorno inseguro en el campus al permitir que agitadores antiestadounidenses y proterroristas acosen y agredan físicamente a individuos, incluidos numerosos estudiantes judíos, y alteren el que fue un entorno académico prestigioso. Muchos de estos agitadores son estudiantes extranjeros”, afirma un comunicado de Seguridad Nacional: “Además, la universidad habría facilitado y participado en actividades coordinadas con el Partido Comunista Chino (PCCh), incluyendo la acogida y formación de miembros de un grupo paramilitar del PCCh implicado en el genocidio de los uigures.
“Esta administración está haciendo que Harvard rinda cuentas por fomentar la violencia, el antisemitismo y su coordinación con el Partido Comunista Chino en su campus”, declaró la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem. “Matricular a estudiantes extranjeros y beneficiarse de sus elevadas tasas académicas para engrosar endowments multimillonarios no es un derecho, sino un privilegio. Harvard tuvo muchas oportunidades para hacer lo correcto. Se negó. Y como consecuencia de su incumplimiento de la ley, ha perdido su certificación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio. Que esto sirva como advertencia a todas las universidades e instituciones académicas del país”.
El pasado 15 de abril, Trump expresó por primera vez su propuesta de eliminar la exención al centro educativo “si continúa promoviendo ‘enfermedades’ políticas, ideológicas y de apoyo al terrorismo”, porque, según Trump, este centro docente no ha hecho lo suficiente para poner fin al antisemitismo.
La universidad negó las acusaciones del presidente y afirmó que no pondrá fin a sus programas de diversidad ni tampoco vigilará la ideología de sus estudiantes extranjeros, como exigió su Administración.
“No existe base legal para rescindir el estatus de exención de impuestos de Harvard”, dijo un portavoz de la universidad a la cadena CNN, a la que aseguró además que “una acción sin precedentes como ésta ”pondría en peligro su capacidad de llevar a cabo nuestra misión educativa“.
La Administración de Donald Trump congeló a mediados de abril 2.200 millones de dólares en fondos federales para Harvard después de que la institución rechazara la demanda del Gobierno de que elimine sus programas de diversidad y vigile la orientación ideológica de sus estudiantes extranjeros.